Hay quienes usan el alto precio pagado, la sangre de Cristo, para ser separados de la condenación de su pecado, pero no la usan para ser separados de su vida pecaminosa...
Estos realmente pisotean la sangre de Aquel que dicen adorar...
"Dios pagó un alto precio por ustedes, así que no se dejen esclavizar por el mundo." (1 Corintios 7:23)