Ayer, domingo 21 de febrero de 2011 en la mañana, dos tipos armados nos amagaron en la entrada de nuestra casa. Al ordenarnos que nos metiéramos a la casa, los reprendí en el nombre de Jesús. Cuando les dije que el ángel de Jehová estaba conmigo porque “el ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen y les defiende”, uno de ellos se aterrorizó y le pidió a su compañero que se fueran. Querían negociar que me metiera a la casa y les diera la cartera y tomaron el celular de mi cinto. Me dijo que me mataría. Yo sabía que ya habían matado y robado casas de mi fraccionamiento y sabía de lo que eran capaces. Yo le quité el celular de su mano y les dije que no les daría nada y que tenían que arrepentirse, que Cristo les amaba pero que les juzgaría según su maldad, y que tenían que irse. El hombre que estaba muy asustado le ordenó al otro que estaba muy enfurecido, que se fueran. Yo lo tomé del hombro y le dije que Jesús me había sacado de cosas peores que las que él estaba pasando. Se enojó mucho y me dijo que no lo tocara y que no le hablara a la policía, si no, volverían. Yo le dije que no le hablaría a nadie, más que iba a orar por ellos. Fue un episodio muy violento y desagradable, sin embargo yo vi el poder de Dios protegiéndonos a mí, a mi esposa y mis tres hijos. Vi como fue Dios quien puso Sus palabras en mi boca y como dos criminales armados huyeron ante la presencia de mi Señor.
He escrito esto para ser testimonio de que la protección sobrenatural de Dios está con Sus Hijos. Mi esposa y mis hijas si se asustaron (con suficiente razón.)
Yo no te invito a hacerte el valiente por ti mismo ante una situación tan horrible como la que mi familia vivió ayer en la mañana. Te invito a poner tu confianza en Dios. Las promesas de Dios son para Sus hijos, o sea, los que viven para Dios y han entregado su vida por completo a Jesús. Si bien, todos estamos expuestos a tener roces en este mundo, yo, y todos los siervos del Señor somos llamados a ser LA SAL DE ESTA TIERRA…Nuestro llamado es a ser de impacto en contra de reino de las tinieblas…Jesús ya venció al mundo.
Si tú no eres un seguidor de Jesús, no puedes esperar estar bajo la cobertura de sus alas. Si estás pasando por una situación difícil y estás listo para que tu corazón sea quebrantado ante el Señor Jesús, te invito a buscar Su perdón, a darle la espalda al pecado y vivir para Él.
Agradezco sus oraciones por mi familia y que la paz de Jesús reine en sus corazones.
Jessie Balderrama
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