Considerado por muchos como la persona más inteligente del mundo, Stephen Hawking le ofrece al mundo sus conclusiones. Recuerdo haber leído su libro “Breve Historia del Tiempo.” Es un libro muy interesante pero sumamente complicado de leer, ya que Hawking intenta explicar sus teorías acerca de los hoyos negros en el espacio y su continuación del estudio de la teoría de la relatividad, o sea, el trabajo de Albert Einstein.
Ambos hombres tienen mucha sabiduría en matemáticas y física, pero hay una gran diferencia entre ellos. Stephen Hawking declara que ha llegado a la conclusión de que Dios no tiene nada que ver con la creación del universo. Parte de la idea central de su próximo libro es que la materia y la gravedad son autosuficientes, siendo la fuerza que creó el “Big Bang,” lo cual creo todo el universo, incluyendo la vida.
Ahora veamos a Einstein. El era un hombre no menos sabio que su colega Hawking, pero si una persona que veía a Dios como el Creador de la grandeza del universo. Mientras uno, hace algunas décadas, se deleitaba en la complejidad de la creación y anunciaba la firma de Dios plasmada en todo el universo, el otro, se ha enamorado de la inmensidad de la creación y no del autor de la misma.
La palabra de Dios dice que el que transgrede y niega a Dios, es un inicuo (perverso,) y no heredará el Reino de los Cielos. Dios dice en su palabra que el que es sabio, demuestra su sabiduría en su manera de actuar, en su temor reverente a Dios.
Hay quienes decimos creer en Dios, pero vivimos como enemigos de Él. La biblia dice que el que ama a Dios, hace Su voluntad.
Y tu…¿Crees en Dios? ¿lo demuestras con tu manera de vivir?
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